¿Estás pensando abrir un pequeño negocio y no sabes de qué? ¿Has estudiado a fondo el mercado y sigues sin tener claro hacia dónde dirigir tus esfuerzos? Pues bien, nuestra intención es ofrecerte algunas claves para que las puedas aplicar a la hora de inaugurar esa PYME en la que tanto esfuerzo estás invirtiendo. Ahí van.
Lo primero es tener claro que Internet es el futuro. Si no estás online no existes, eso es un hecho. Puede ser que no te des demasiada maña con las nuevas tecnologías, o que no te atraiga una tarde sentado delante del teclado. Pero la Red te permite dar a conocer tu idea y tu empresa, así que no te cruces de brazos y actúa en consecuencia. Además, para explicarte mejor de qué estamos hablando te vamos a poner un ejemplo. Si visitas esta web de venta de recambios y accesorios de desguaces vas a comprobar cómo todo lo que se oferta en ella está al alcance de un clic y, lo que es más importante, es una información que llega directamente al cliente.
Otra cuestión fundamental: una buena idea puede funcionar, pero sabiéndola implementar. En efecto, a veces ocurre que tenemos una forma aún no explotada de vender cualquier objeto, o de presentar ciertos artilugios de uso común que adquieren otra perspectiva totalmente distinta para ti. Pero si tienes esa buena idea que puede hacerte ganar mucho dinero tienes que saber hacerla funcionar. No sirve únicamente con tenerla, hay que darle al botón de encendido.
Ten cuidado con venirte abajo demasiado pronto. Estamos en unos tiempos convulsos que no garantizan el éxito inmediato, sino la progresión lenta de los negocios. En otras épocas era muy habitual ver subir como la espuma ciertas iniciativas, las cuales han caído de manera estrepitosa. Es mejor que la consolidación de tu pequeño negocio se haga poco a poco, a su amor. Y si los dos o tres primeros meses no llegan con los resultados apetecibles no te rindas demasiado pronto, espera un poco más.
Y por último, pero no por ello menos importante: pon el corazón y tu trabajo en el nuevo proyecto, pero no te olvides de lo demás. Si te vuelcas al 100% en esa nueva aventura y te aíslas de lo que te rodea acabarás quedándote solo si al final la cosa no sale bien. Así que no pierdas de vista que tienes una vida social y personal que demanda tu atención.
Y si al final te lanzas y te conviertes en uno de esos emprendedores que se arriesga a inaugurar una nueva etapa de su vida abriendo un negocio, queremos que sepas que te admiramos y que te deseamos lo mejor en tu nueva etapa. Ánimo y siempre mirando hacia el futuro. Será la mejor manera de llegar a dónde quieres.