La agencia estatal rusa RIA Novosti, que ha recogido las palabras de Chémezov, recuerda que el país árabe es un importante cliente de la industria armamentística rusa. En septiembre pasado ambos países alcanzaron acuerdos militares por un valor de 3.500 millones de dólares, según el director del Servicio Federal de Cooperación Técnica, Aleksandr Fomin.
“En el Mar Rojo, y en el caso de una ocupación superior al 50%, hemos previsto una inversión de 30 o 40 euros por asiento”, ha explicado el ministro. Las circunstancias sociopolíticas han castigado el turismo especialmente de las zonas de Luxor y Aswan y los cruceros por el Nilo, según el político egipcio, cuyo gobierno realiza también acciones de co-marketing con los touroperadores para incentivar las visitas extranjeras.
Una fuente próxima a la exportadora estatal de armas rusa, Rosoboronexport, explica la agencia informativa, dijo que en el período 2008-2009 los contratos militares con Egipto rondaron los 300 millones de dólares, y en el 2010-2012 aumentaron hasta los 1.700 millones. Estos acuerdos militares quedaron paralizados a consecuencia de la revolución de 2011, aunque Moscúa suministró al país africano varios sistemas antiaéreos y helicópteros.
El próximo 1 de noviembre, Egipto empezará a subvencionar a las compañías aéreas que unan los mercados emisores de turismo con los destinos del Mar Rojo y el Alto Egipto. El ministro de Turismo del país africano, Hisham Zaazou, ha asegurado que las ayudas públicas no solo se otorgarán a las aerolíneas chárter, sino también a las regulares y a las low cost.
Al Sisi destacó los esfuerzos egipcios para mediar en la consecución del alto el fuego entre israelíes y palestinos, que puso fin a la ofensiva israelí de julio y agosto pasado, que acabó con más de dos mil 100 muertos.
Según Al Sisi, la conferencia de El Cairo “completa los esfuerzos egipcios” para conseguir la tregua entre palestinos e israelíes después de la última ofensiva y para establecer la reconciliación interna entre los palestinos.