Oyarzun buscó aproximar las posiciones entre el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y la administración de Mariano Rajoy, pero los intentos fueron infructuosos. No sólo no pudo convencer a la Presidenta argentina de asistir a la cumbre de presidentes iberoamericanos en Cádiz sino que tampoco fue tarea fácil inducir a los empresarios e inversores españoles de volver a mirar hacia el país.
“Tacloban está totalmente destruido. A alguna gente se la ha ido la cabeza por el hambre y por haber perdido a sus familias”, asegura Andrew Pomeda, un profesor de 36 años, a la agencia France Presse. “La gente se está volviendo violenta. Están saqueando negocios, centros comerciales, en busca de comida, arroz y leche”. “Los supervivientes caminan como zombis buscando comida, es como una película”, ha dicho una estudiante de medicina de Leyte a la agencia Reuters. Otros testigos hablan de decenas de cadáveres en los arcenes de las carreteras. La policía se ha desplegado para evitar el saqueo de gasolineras y otros comercios.
El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, ha sobrevolado Leyte en helicóptero y ha aterrizado en Tacloba para obtener información de primera mano sobre la catástrofe. El mandatario ha asegurado que la prioridad es restaurar el suministro eléctrico y las comunicaciones en las áreas aisladas y hacer llegar ayuda médica y comida a las víctimas.
Aquino ha aceptado también la ayuda de sus aliados Estados Unidos y Europa. El secretario de Defensa estadounidense, Chuck Hagel, ha ordenado al Centro de Mando del Pacífico que despliegue barcos y aeronaves para colaborar en las labores de búsqueda y rescate y transporte de ayuda. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, ha enviado un mensaje al Gobierno filipino en el que dice: “Estamos preparados para contribuir con ayuda de emergencia y asistencia si se nos solicita en este momento de necesidad”. El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, ha ofrecido su pésame y ha afirmado que los organismos humanitarios de la ONU están trabajando con el Gobierno filipino para proporcionar apoyo de emergencia con rapidez.
El primer ministro vietnamita, Nguyen Tan Dung, declaró el viernes tras una reunión de emergencia que a pesar de que el tifón llegaría debilitado, aún tiene fuerza para “complicar” la situación, por lo que se han tomado medidas de seguridad para “limitar las consecuencias en términos humanos y materiales”. La aerolínea estatal Vietnam Airlines avisó que varios de sus vuelos serán interrumpidos o cancelados el domingo.
Un vecino de Tacloban ha contado cómo él y otros se refugiaron en un vehículo todoterreno aparcado para protegerse de la tormenta, pero el vehículo fue arrastrado por una muralla de agua. “El agua era tan alta como un cocotero”, ha dicho Sandy Torotoro, de 44 años, informa Associated Press. “Salí del Jeep y fui barrido por el agua, con maderos, árboles y nuestra casa, que fue arrancada de sus anclajes. Cuando nos llevaba el agua, mucha gente estaba flotando. Levantaban las manos y gritaban pidiendo ayuda. Pero, ¿qué podíamos hacer? Nosotros también necesitábamos ayuda”.