Un proceso de ahorro adecuado te ha de llevar al desguace con tu 4×4

Parece que el proceso que hay que seguir cuando un todoterreno se avería  ha abierto la caja de los truenos o, al menos,  la de las dudas. En efecto, ahora mismo este tema está en el candelero, pero no es el único. Otros asuntos que tienen que ver con la obsolescencia programada gravitan en torno a los medios que hay que elegir para lograr un poco de operatividad, lo que nos confirma que con toda avería hemos de seguir todos los conductos que, como usuarios, debemos llevar a cabo.

Siendo sinceros, no todo lo que actualmente nos llega sobre este particular es negativo. Es cierto que se han hecho muchos avances para acercar al cliente algunos servicios que le permitan optimizar su todoterreno. Ahí está, por ejemplo, el desguace 4×4 online, sobre todo el que tiene un  formato sencillo pero, a la vez, completo. ¿Por qué? Pues porque gracias a él se puede solicitar información, comprobar las piezas que hay disponibles, etc. Son Webs que se ponen al servicio del cliente, así que siempre serán bienvenidas, ya que aportan la posibilidad de adquirir cosas a precios excelentes… Y claro, con una calidad adecuada para nuestro vehículo.

El problema es que, por otra parte, se hace patente la necesidad de establecer una serie de criterios unificadores y no de crear puntos de desencuentro. Y ahora mismo el sistema nacional de recambios usados para todoterreno adolece de algunas carencias muy significativas. Si utilizásemos una figura retórica, el actual mapa de los desguaces para 4×4 es como el de los Reinos de Taifas, todo desmembrado y con diecisiete modelos distintos de entender la misma cuestión. No solamente porque hay formatos de revisión distintos, sino porque no en todos los sitios se aplican estándares bien delimitados y afinados.

Claro, esas diferencias suponen precios distintos, formas de aplicación de las normas ISO distintas y el establecimiento de fuertes agravios comparativos que provocan una disparidad de precios increíble. Supuestamente todo está calibrado en base a multitud de parámetros, pero en los territorios limítrofes se producen diásporas de usuarios que aprovechan los mejores precios de otras zonas, lo que provoca un demérito para aquellos desguaces que pertenecen a la provincia cara. Y esto se tiene que lograr arreglar, porque aunque los negocios van cada uno por su lado deben poder encontrar un punto  medio en el que poder moverse. Y dar un buen servicio,  claro, al que lo necesite.

Que la cosa no es sencilla lo confirma el que ahora mismo un montón de todoterrenos circulan sin saber si están en buena forma o no. Y eso no es un capricho, es una constatación de un hecho sin precedentes que nunca había ocurrido en nuestro país y que, esperemos, termine corrigiéndose. La seguridad en la carretera y el mantenimiento del parque móvil dependen de ello, así que el que los desguaces de 4×4 se hayan puesto las pilas merece, al menos para nosotros, bastante la pena.

 

Deja un comentario